Nuestra parroquia todos los años recolecta juguetes, gracias a la gestión de nuestro párroco Padre Juan de la Cruz Suárez, en el programa de Radio María “Salió el Sembrador”. En ese programa hace un llamada a los fieles para hacer un regalo a un niño. Éste debe ser no bélico. También debe contener el sexo y la edad. Fotos de mi parroquia, Nuestra Señora de la Asunción, altar y pesebre:
Este Santa Claus, o Viejo Pascuero en Chile fue regalado por la hermana del padre a cargo de la parroquia
Como todos los años nos fue bien y juntamos muchos regalos:
En una sala de la parroquia clasificamos los juguetes. Esta tarea es ardua, pero la gran mayoría fue hecha por las fieles. Yo ayudé solamente un viernes por la noche.
El día de reparto fue de locos. Éramos tres vehículos. Nos correspondió ir a Batuco, localidad rural al norte de Santiago. Esta zona es pobre y nuestro objetivo era dar una Navidad más alegre a los niños en torno a su parroquia.
De Reyes Magos antes de repartir los regalos
Cuando llegamos a la parroquia había muchos niños esperándonos. Gracias a la experiencia de los voluntarios (más de quince años), hay una lista con el nombre de cada niño. Es más, siempre se lleva un stock adicional del 20% de ragalos para que los niños no inscritos reciban un regalo. Ocurre que entre los niños éstos corren la voz que iremos y por eso siempre llegan muchos niños no inscritos.
El reparto fue bastante ordenado, a pesar de la gran cantidad de gente. Yo estaba con las listas llamando al niño(a) favorecido(a).
La sonrisa de esta niña es la mejor recompensa que uno puede recibir
De vuelta a la parroquia, debí continuar con el apoyo de la “Feria de las Pulgas”, donde los feligreces nos donan objetos de valor que ya no usan para venderlos. Al final, colaboré ordenando y guardando la mercadería que no se vendió.
Hubo dos ventas: misa de la mañana y luego en la tarde
Fue un día agotador, de hecho no almorcé, pero poco me importó. Este fue mi regalo al niño Dios.